La progeria es una rara enfermedad genética que produce un envejecimiento rápido en los niños. Se destaca porque los
síntomas se asemejan bastante al envejecimiento humano normal, pero
ocurre en niños pequeños. En la mayoría de los casos, no se transmite de
padres a hijos. En algunas pocas ocasiones, se observa en más de un
niño en una familia.
Los síntomas incluyen:
No hay ningún tratamiento específico para la progeria. El ácido acetilsalicílico (aspirin) y las estatinas se pueden usar para proteger contra un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular.
- Deficiencia en el crecimiento durante el primer año de vida
- Cara estrecha, encogida y arrugada
- Calvicie
- Pérdida de las pestañas y las cejas
- Estatura baja
- Cabeza grande para el tamaño de la cara (macrocefalia)
- La fontanela abierta
- Mandíbula pequeña (micrognacia)
- Piel seca, descamativa y delgada
- Rango de movimiento limitado
- Retardo o ausencia en la formación de los dientes
No hay ningún tratamiento específico para la progeria. El ácido acetilsalicílico (aspirin) y las estatinas se pueden usar para proteger contra un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular.
Comentarios
Publicar un comentario